26/2/13

Nouvelles Impressions d’Afrique






Raymond Roussel (1877-1933) fue un singular escritor francés, poco popular en su época pero que influyó de manera notable en movimientos como el surrealismo, los patafísicos, el Oulipo o numeroso escritores y artistas posteriores como Dalí y que justifica que Hermes Salceda le haya llamado “el ilustre desconocido”. Además, fue un pionero en el desarrollo de nuevos métodos de escritura, una ciber-escritura muy anterior a la digitalidad basada en la digresión y la homonimia. Roussel, de familia acomodada y de extravagante personalidad, se vio atraído por la música en su niñez pero, de pronto, a los diecisiete años decidió no volver a componer para volcarse en la escritura. Sin problemas económicos, costeó la publicación de sus propias obras aunque nunca alcanzó el éxito. Tuvieron que pasar décadas hasta que un ensayo sobre su obra realizado en 1963 por Michel Foucault lo devolvió a la luz pública. Entre sus obras, se encuentran Impressions d’Afrique publicado en 1910 y su secuela Nouvelles Impressions d’Afrique, poema de cuatro cantos con 59 dibujos publicado en 1932. La primera fue llevada al teatro por Edmond Rostand.
 
 
Roussel se interesó sobremanera sobre el método de escritura, sobre- por así llamarlo- el algoritmo del escritor, un procedimiento que permitiera desarrollar obras, un sistema para crear historias, mediante pasos establecidos que se complementaran los unos con los otros. Esa pionera cibernética rousseliana –creada décadas antes de la actual era digital- fue mantenida en bastante secreto por el escritor, pero ha tenido una influencia definitiva en el arte contemporáneo. Un procedimiento de escritura basado en la ampliación sucesiva del discurso mediante la digresión, la homonimia, el aprovechamiento de la ambigüedad, los retruécanos, la búsqueda de palabras similares, las combinaciones fonéticas, la concatenación de hechos y anécdotas aparentemente aislados así como de los juegos de palabras. En un texto póstumo, Cómo he escrito algunos de mis libros (traducida al español por Gimferrer y publicado por Siruela), Roussel da claves de cómo construía sus historias. El escritor buscaba dos palabras de similar pronunciación o escritura. Un ejemplo sería la pareja de parónimos billard (billar) y pillard (bandido). Estas palabras se introducían entonces en frases compuestas de palabras idénticas con sentidos diferentes. A partir de estas premisas Roussel creó:
 
1) Les lettres du blanc sur les bandes du vieux billard (las letras de tiza sobre las orlas del viejo billar) y
2) Les lettres du blanc sur les bandes du vieux pillard (las cartas del hombre blanco sobre las hordas del viejo bandido).
 
El último paso era idear una narración que empezara con la primera frase y acabara con la segunda de manera natural. Las dos frases arriba citadas inspiraron, por ejemplo, a Roussel a escribir la novela “Impresiones de África”.
 
Ahora, Inés Laitano ayudada por Philippe Bootz (Laboratoire Paragraphe de la Université Paris) y Hermes Salceda (de la Universidad de Vigo) han tomado Nouvelles Impressions d’Afrique y la han volcado en el medio digital. Es conveniente utilizar Chrome para visualizarla correctamente. El método de ampliaciones sucesivas, de digresiones a medida que avanza el texto, de Roussel se presta perfectamente a aplicarlo en el ordenador. En las siguientes imágenes, por ejemplo, se puede ver el texto original al inicio del primer capítulo en el que las sucesivas puntualizaciones del texto se muestran entre paréntesis, mientras que más abajo se observa cómo estos subtextos van apareciendo a medida que se llega a los enlaces, expandiéndose el texto sobre la misma pantalla.
 



 
 
Hay tres vías de explorar la obra: línea, topográfica e icónica.
 
Una estructura formal que en papel se indica por paréntesis:
 
A--- ( --- (( --- ((( --- ))) --- ((( --- ))) --- ((( --- (((( --- )))) --- (((( --- ((((( --- ))))) --- ((((( --- ))))) --- ((((( --- ))))) --- )))) --- (((( --- )))) --- ))) --- )) --- ) --- ( --- ) ----- B
 
Y que en el ordenador cristaliza como enlaces dentro de enlaces, bucles dentro de bucles.
 
Merece la pena, asimismo, leer el libro Semiotica 2 de Julia Kristeva en donde se analiza con cierto detalle la obra original comentada.







2 comentarios:

  1. Muchas gracias por haber dedicado esta entrada de su blog a nuestro trabajo.
    Hermes Salceda

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por haber dedicado esta entrada de su blog a nuestro trabajo.
    Hermes Salceda

    ResponderEliminar