Daniel Rozin es un artista americano-israelí que trabaja en artes visuales. Unas de sus creaciones más interesantes son los espejos mecánicos interactivos, fabricados casi con cualquier cosa y que se inspiran en los sistemas de óptica adaptativa para los espejitos de los telescopios adaptativos, o de control de hornos solares. Así, pequeñas unidades mecánicas, activadas independientemente, giran en tiempo real pudiendo, de esta manera, crear formas y diseños.
Una interface visual permite captar los movimientos del espectador y, en función de ellos, activar los elementos del espejo permitiendo crear una respuesta interactiva o dibujar la sombra del que observa.
En cualquier caso, un resultado bello y original. Una labor, además, muy artesanal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario