24/5/20

La guerra alemana



 


La guerra alemana, (Galaxia Gutenberg, 2016), de Nicholas Stargardt, es un recopilatorio de cartas entre soldados alemanes de la segunda guerra mundial y sus familias, así como de informes del archivo de las SS, que el autor utiliza para concluir que la gran mayoría de los alemanes supieron muy bien las atrocidades que el régimen nazi conocía y que, además, no callaron por miedo o por patriotismo en medio de una guerra sino que lo aceptaron por convencimiento, por horrible convencimiento. Y esto ocurrió en todos los estratos de la sociedad, en las clases altas y en las bajas, entre los empresarios y entre los trabajadores, entre los católicos, los protestantes y los ateos. El antisemitismo, ya de por sí bien implantado en gran parte de Europa de inicios del siglo XX, se exacerbó en aquella sociedad que participaba gustosa en todas las organizaciones nazis y que hizo suyas las consignas asesinas de Göbbels. Alemanes ordinarios que se comportaban de manera más nazi que sus propios jerarcas. 

Aunque las cartas son sobre todo textos que reflejan el amor familiar, la tristeza de la lejanía, el miedo a la muerte en combate o la nostalgia en fechas señaladas, los soldados cuentan también las batallas que libran, las ejecuciones que perpetran o las acciones de represalia que realizan. También toman fotografías, en muchos casos estremecedoras. Y en casi todas esas cartas no hay ningún remordimiento, ningún cuestionamiento de las órdenes recibidas o de las leyes nazis. No eran sólo las barbaridades cometidas contra los ejércitos enemigos o contra la población civil de los países invadidos. Si todo ello es ya horrendo, más aún lo es el asesinato de recién nacidos con discapacidad o jóvenes que ríen y hacen burlas del jabón hecho con cadáveres de judíos. Una sociedad capaz de gustar de la música o la literatura mientras aniquilaba semejantes. Una sociedad podrida hasta la médula que, incluso cuando era evidente ya que la guerra estaban perdida, persistió en su marcha hacia el infierno sin dudas morales.
  

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